Lo perdido?

Con vuestro permiso, aprovecharé para agradecer...

…Agradecer siempre, en primer lugar, que mi mente esté sobria, yo siempre pienso que hay algo rondando por ahí que me ayuda, no un Dios, ni nada parecido, hemos dicho que los pies tienen que estar en el suelo, y no falto a mi espiritualidad, la alimento a diario, constantemente, la ejercito bastante más que a mis músculos, con cada amanecer en la playa, solo digo, que hay algo, a veces un sentimiento, el amor, la amistad profunda, el simple echo de llevar algo a puerto a veces es suficiente, para darte cuenta que el mismo velero que acabas de atracar, antes, lo habías atracado pero a modo pirata, verdad?

Con la mente sobria todo cambia, así que todo es posible gracias a este echo, sin el primer paso no se puede dar el segundo, primero un pie, luego el otro, y así  sucesivamente, por eso el objetivo de cualquier cosa que hago ahora en  mi vida es en pro de mi sobriedad, y aunque a veces, se pueda pensar que hago temeridades, y desde un punto de vista de buscar la absoluta tranquilidad, para que nada altere tu rutina, tu nube, porque la tranquilidad de la rutina no es como vivir en una nube? yo se que toda acción con lleva un riesgo, igual que conducir.

En activo todo es un desastre, y hablo de que hasta un desastre es más desastre estando en activo, y voy a hablaros de un gran desastre, un desastre estando en activo, un desastre estando casado, es un recuerdo que me vino estando esposado en el suelo, que nunca se fue por supuesto, es lo bastante estratosférico  para siempre estar rondando en mi cabeza, de una manera u otra.

Creo, y casi siempre digo, creo, porque realmente seguro de algunas fechas no estoy, de otras cien por cien, pero los números bailan cuando me refiero a ciertas épocas, me atrevo a decir que era final de verano de 2016, después de recaer al periodo de sobriedad de antes, después de sentirme en territorio conquistado, después de ser vencido por la nube rosa,  justo antes del aniversario de mi matrimonio, el 5 de Septiembre de 2015 me casé, pues unas semana antes o por ahí del aniversario, mi matrimonio a pesar de no haber cumplido el año, ya estaba casi roto, ella ya se había marchado de casa, a casa de su madre, se marcho a principios de agosto, lo recuerdo porque era la feria de mi pueblo, le hice perderse muchas cosas a muchas personas, no tenia miramientos, creías tener razón en todo, tu lo razonabas todo a tu antojo, porque para mi beber y drogarme era super razonable, y ahora, visto desde estos ojos que tengo ahora, os digo a quien le pueda interesar, que robar nunca es razonable, salvo si tu hijo esta hambriento, nada te hace titular de algo que no es tuyo, y quien dice robar, dice faltar al respeto, a la confianza, que los que te quieren, han depositado en ti, y no le diste importancia, ahora comprendo ese dolor, ahora se medianamente lo que es razonable, el egocentrismo de un alcohólico, destroza, cualquier relación en cualquier sentido.

El día en concreto fue un Sábado, es un día de la semana peligroso para cualquier alcohólico, es un día especial, en verdad a mi me valía cualquier día, yo los hacia especiales y ya bastaba, pero los Sábados como que te relajas más, según el dinero que tengas claro, todo depende de eso, y ese día tampoco es que tuviera mucho, pero fui a trabajar con mi hermano fuera del pueblo, no recuerdo donde, fue un trabajo de carpintería, por aquellos entonces aun parecía, o eso creía yo, que todo se arreglaría, y que mi vida seguiría, aun tenia casa, aunque ese día la puse patas arriba por lo visto, hay momentos que no recuerdo, o solamente los recuerdo como imágenes.

Recuerdo llevar unos pantalones azules de trabajo, lo recuerdo porque los lleve todo el fin de semana, la primera vez que los recuerdo fue, sentado en el asiento del copiloto de la furgoneta de mi hermano, llegando al pueblo, bastante antes mi cabeza ya iba maquinando como entrarle, acercándonos a casa y viendo que sus intenciones era soltarme en la mía y seguir solo, y yo sabia donde iría después de soltarme, porque a él le gusta tomarse unas cervecitas, como a cualquier persona, pero sabia casi más que nadie, que yo no era buena compañía para esos menesteres, pero, yo no iba a permitir, que un sábado, llegando de trabajar sobre las una que eran, me dejara en casa casi sin un duro,  y el se fuera de cervecitas sin mi, ja, y después de trabajar no quería pagarme por lo mismo, pero como el trabajo estaba echo, a veces no se podía negar, pensando quizás que esta vez seria la buena, que me comportaría, que después de unas cuantas me iría a casa, y como se dice que quien ataca primero da dos veces, pues antes de llegar le propuse ir a tomarnos unas cervezas, el pobre no se pudo negar.

A pesar de que casi lo tenia arreglado con mi mujer, nos tiramos unos días sin hablar, pero empezaba a retomarse el contacto, yo, me sentía libre, o quería sentirme mejor, un alcohólico siempre esta preso, pero como ella no estaba en casa aun, con eso me bastaba, he de decir, que nunca tuve la intención de ir tan lejos, la verdad es que la intención, salvo en contadas ocasiones de desastres espirituales, es el control, el sueño siempre esta presente, porque aunque hubo momentos, mi descontrol no me dio nunca felicidad, pero por eso se llama descontrol, porque no lo puedes controlar, para mi el sentimiento de aquel día que recuerdo, entrando al bar donde al final, la finura para conseguir lo mío, hizo que acabáramos mi hermano y yo, era semejante a cuando vas al campo a comer un domingo, así todo preparado para la cervecita, el choricito, la cervecita, el filetito, otras cuantas cervecitas sin filetito, la copita de vino, el jamoncito, y el café.

Se puede llamar de varias maneras, la gota que colma el vaso, la raya de te has pasado de la raya, o mas bien ,te has pasado a la raya...

… ya todo termino.

La poca intención de control que tuvieras desapareció, y no la volverás recuperar, al menos yo no podía, a pesar que durante un buen rato, ella empezó a llamarme por teléfono, porque era la hora propia, o adecuada, la chispa, o la mecha, sea lo que sea es un momento que cuando yo atravesaba no había vuelta atrás, mi única intención de ahora en adelante era que no me faltara el alcohol y la cocaína.

Después de dar esquinazo a las llamada telefónicas, apague el móvil vaya, una manera muy rápida y muy poco considerada de hacerlo, pero ya sabéis lo que mi cerebro quería, porque era mi cerebro, recordad que yo tenia otros sueños, después de ese apagón tecnológico, ni si quiera recuerdo salir del primer bar, la siguiente vez que recuerdo los pantalones azules es ya en otro bar, y solo recuerdo una imagen y poco  mas, lo demás, lo poco que se del tiempo transcurrido en ese bar, lo sé porque me lo conto mi hermano. 

Me recuerdo bailando, bueno, rectifico, haciendo el payaso, sin preocupación alguna, hacia la barra, recuerdo el vaso de tubo como en el final de un túnel, no recuerdo ninguna persona del bar, pero la imagen del vaso si, recuerdo hasta que era whyski, con sevenUP, recuerdo el liquido transparente, eso solo ocurría cuando tenia dinero.

Conservar hoy en día cientos de recuerdos inolvidables, que gracias a personas increíbles, estoy viviendo en sobriedad, conservar el sentimiento de un abrazo, con una persona que solo conoces porque tienes una furgoneta, que solo has hablado con ella por ese motivo, pero que has creado tal relación de cariño, que cuando por primera vez sientes su abrazo, sabes de sobra que es abrazo amigo, abrazo verdadero, y poder con los días, pensar en ello, y volver a sentirlo, eso, amigos míos, conservar eso es suficiente motivo para luchar, no quiero perderme más momentos de mi vida, y mucho menos con vosotros a mi lado.

Tengo otra imagen borrosa, pero muy común también en algunos destellos, la imagen de las tragaperras, si esa imagen aparece en la historia, ya no es que se termine todo, ya es que puede ser cualquier cosa, y esta por lo visto disparo lo peor que se puede disparar en medio del colocón, la euforia, la sientes desde el primer trago, y va en aumento, pero a veces, según se va terminando el dinero, cosa que a veces ves venir, el bajón va apareciendo, como que te vas acercando a casa, y ya cuando no tienes nada, pliegas velas y a dormir, pero si te tocan 300 euros, la cosa cambia. No lo recuerdo, pero fue así, y este echo es duro, no recordar es duro, incluso ahora, ver que mí día aunque tuvo las mismas 24 horas que el tuyo, para mi no fue así, perdí horas, perdí días, y tantas cosas....

…ese día perdí mi dignidad, nunca tuve mucha pero la poca que quedaba quedo aquella noche machacada, el siguiente recuerdo me lleva a una furgoneta que tenia, como mis pantalones, azul, me recuerdo muy vagamente intentando aparcar la furgoneta en mi calle, búa, por fin a casa?, con 300 euros la fiesta no termina ni en casa, ni en un día.

Mi ahora exmujer, y perdón que hable, o mejor dicho, que no hable de mujeres o parejas si no es necesario, para comprender mis sentimientos, y mucho menos de manera despectiva de ninguna 

de ellas , todas fueron en mayor o menor medida sufridoras inocentes de mi alcoholismo, y desde aquí un perdón a cada una de ellas, de mi manera mas sincera, pero mis experiencias como alcohólico es lo que cuento aquí, esto no es una telenovela de desamores, aunque una ruptura siempre fue la puerta del infierno, en la mayoría de las ocasiones, las provocaba cualquiera de mis múltiples defectos, a veces incluso intencionadamente, para irme a beber, cuando, el deseo de corrupción, es mayor que la razón, a cada instante ese día también, y cuando ella, que seguramente toda la tarde estuvo en vilo, se cruzo por fin en mi mirada, el recuerdo que tengo es de vencido, pero por lo visto no lo estaba, creía que si, ella aparco su coche, me ayudo a subir a la casa matrimonial, en la que yo solo habitaba, en la misma acera que la casa de mi madre donde me crie, justo donde ahora estoy viviendo, justo donde ahora estoy escribiendo, a gatas me contó después de la reconciliación, porque al final incluso me dio otra oportunidad, que por supuesto no supe aprovechar, a la vista esta, ahora ya ese día no veía nada, y el siguiente recuerdo que tengo, porque intento buscar uno en medio y no lo encuentro, viene tras esta serie de acciones, de guerra podíamos decir, cuando después de casi tres días volví a abrir la puerta de mi casa fue, sin exagerar, la viva imagen de la guerra, es lo que sentí, tenia exactamente el mismo dolor en la muñeca que tengo hoy, recuerdo el dolor de abrir la puerta, si uno no esta bebido conserva detalles excelentes, y revivo el dolor, en muchas mas partes.

Por lo contado, que no por otra cosa, se que, una vez en casa, Trompo escapó, contar esto es también bastante doloroso, él, como digo siempre, sufrió mi alcoholismo en primera persona, siempre, ahí tenia 6 añitos, otra cosa que me perdí, días de cariño de él, porque el me quiere, igual que yo a el, no, mucho mas, una persona no aguanta lo que un animal, nunca le puse la mano encima, no hizo falta mas que a modo de cachete, lo que él sabe lo aprendió solito, y supo al instante que venia destrucción, y como un ave moderno de ultima generación fue nuestro encuentro, él olía el alcohol, como se acercaba a casa, el antes que nadie sabía que yo llegaba a casa, y salió disparado, no lo volví a ver hasta el lunes, lo primero que hice, pero esa noche,  mientras mi exmujer iba a buscar al perro algo ocurrió, vino mi Madre, que por supuesto estaba pendiente en el balcón de cuando llegara, para quedarse a cargo, y no se que desencadeno el asunto pero el sofá  estuvo del revés, sillas tiradas, por lo visto los nervios se apoderaron de mi, mi exmujer siempre creyó que tuve que consumir cocaína entre que ella volvía, pero yo no lo recuerdo, que cuando ella me llevo era un trapo, y cuando volvió era Hulk, y lo que tengo con total claridad ahora mismo, es el recuerdo de ver desde la puerta del piso, era un piso primero, con una escalera recta hasta la calle, 18 escalones y dos mesetas, una barandilla de acero inoxidable y abajo en el fondo, dos policías locales, vecinos de Alameda los dos, uno intimo amigo de la infancia, y aun sigue siendo mi amigo, estuve con el un rato en el festival, así de maravillosa es la sobriedad, te devuelve amigos a los que les hiciste férreo enemigo, porque luche esa noche, recuerdo, estar descalzo,

en la parte superior de la escalera, el otro policía me pregunto, que pasa Germán? yo ni contesté, lo primero que hice fue girar la cabeza, buscando un culpable de que la policía estuviera llamando a mi puerta, mi madre no pudo dejar de contestar que ella había llamado a la ambulancia, pero por defecto, la ambulancia, cuando hay casos en los que hay que tranquilizar a una persona, llaman a la policía, os imagináis la postal, dos mujeres, ante un drogadicto y borracho conocido, la policía abajo,  me podían haber acusado en ese momento de cualquier cosas, hasta de violencia de genero, estáis al tanto de la gravedad de la situación, que aunque yo haya tenido la suerte de nunca haber tocado una mosca,  si que es verdad que haces cosas que luego no recuerdas, y a veces el miedo es terrible, pero mi ateque era contra el mobiliario, a lo Kurt Cobein.

El policía intento subir la escalera, y digo intento porque conforme subía bajo, ha sido la única agresión que he propinado a alguien en mi vida, conforme subía no se ni como fui capaz, le plante mi pie en el pecho, estaba con ventaja, estaba arriba, rodaron los dos escaleras abajo, y ya que os voy a contar, mas que nada porque no recuerdo la pelea, bueno, mas que pelea forcejeo extremo, las paredes eran blancas, cuando abrí la puerta fue como el rastro de goma que dejan cientos de ruedas al pasar por el suelo, montones de tizones de mis zapatillas por lo visto, no lo recuerdo.

A veces piensas, que menos mal, que de algo te acuerdas, joder, menos mal, no todo esta borrado, hay imágenes que te transportan, igual que ha habido un tiempo entre mi ultimo festival, ósea el primero en mi vida, y este, hubo un tiempo entre la ultima vez que me pusieron los grilletes y esta, justo 6 años, a veces preferirías borrar algún recuerdo que quedo, cambiaria el cromo. 

Recuerdo estar en el suelo de la puerta de la calle, en el suelo, exactamente igual que este fin de semana, con las manos a la espalda, con un corro, en aquel momento todos mis vecinos, alrededor de 50 personas había, todos lo vieron, todos me ven a diario, todos me dan su cariño, miraban con pena como cada vez iba mas abajo, en aquel momento el corro que se formo eran mis vecinos, mi familia, se presentaron mis hermanos, tendríais que haber visto la cara de mi hermano el carpintero, que desilusión mas grande, otra vez confirmado , no vale como compañero de algunos menesteres, ebrio para ninguno,

el policía, encima de mi haciendo tanto esfuerzo que tubo que coger la baja creo, acabo molido, según el mismo me conto después, este fin de semana también hubo corro, pero mas grande, recuerdo el sentimiento en la arena, mientras el guardia estaba encima mía reviví cada sentimiento, cuando tuve las manos a la espalda reviví cada sentimiento, y por supuesto hubo más recuerdos inesperados para este sábado, que ahora si, había conseguido, en 2022, hacerlo especial,  y no solo ha sido especial, este acontecimiento ya ha marcado mi vida para siempre, tuve la suerte de no subir como aquella noche al coche patrulla, lo vi cerca, me vi en el calabozo, otra vez, después de dos años y medio trabajando mi sobriedad duramente, me volvieron a amenazar con ello, la experiencia te da silencio, ahora estoy sobrio, ahora soy mas listo, ahora no me quedo otra que agachar mi cabeza para como decía el policía no me la reventara, miedos mayúsculos, aquel sábado, dormí en la comandancia de Antequera, como el domingo era fiesta, el juez hasta el lunes no estaba, fue un infierno que de verdad no estoy en condiciones de revivir al detalle, solo diré, otra vez, que este blog se titula Entre un Patrol y una Furgoneta, que lucho dada día de mi vida por no repetir esos viajes, y que cuando me vi tan cerca, tan cerca volví a sentir el fracaso, he vuelto a sentir las miradas de la gente confirmando el desastre esperado, mucha gente confirmo su desconfianza este fin de semana, otros tantos empezaron a dudar, mas de uno dio por sentado la recaída, incluso compañeros de reunión, pero hubo una desconfianza, que fue, lo mas normal del mundo, pero que clavo muy muy dentro el puñal.

Yo no avisé a nadie, para ir al hospital, las cosas rápidas, estaba machacado, en muchos sentidos, pero aquí viene, cuando el desastre, es menos desastre, porque estas sobrio, como has estado en condiciones de no hacerte el chulo con la policía, ellos no me tenían por victima, batalla perdida, de la experiencia, cállate y todo terminara, y así fue, me dejaron ir porque me calle, como estaba sobrio pude conducir mi furgoneta, pude ir al hospital, y pronto estaba de vuelta a casa, tres días tardé en volver en 2016, hay muchas maneras de solucionar las cosas y he aprendido que las que yo utilizaba casi nunca fueron las correctas, ahora puedes empezar a corregirlas, a poner en practica tu nuevas formas de solucionar las cosas, pero cuando llegue del hospital, abrí la puerta de mi casa con exactamente no, mas, esta vez has sido bastante mas doloroso, aquel día no hubo parte de lesiones, este año si, pero este año falto un informe, no estaba preparado para cuando mi madre, abrió por primera vez la boca ante mi, después de intentar explicar de manera que no se preocupara, me dijo, sin ningún tipo de ironía...

 ...no estarías mareado.

No la culpo, ya nos hemos perdonado, instantáneamente ella supo que la había cagado, mejor que una madre, nadie conoce a su hijo, me vio tantas veces así, que el miedo le hizo reaccionar de la manera, por cierto que a reaccionado mucha gente, normal también, otros muchos nunca dudaron, pero cuanto cuesta ganar la confianza de la gente para un alcohólico, alguien tiene idea, del esfuerzo que hoy veo arrancado de mi adentro?, ese que gane a tanto pico y pala, es el premio de tanta constancia, el que ahora, tenga que volver a demostrar mi cojones, y permítanme un taco de vez en cuando porque esto, señores y señoras, este sufrimiento de hoy, lo tengo gracias a mi sobriedad, y por eso doy gracias, y por eso quiero agradecer primero lo primero, porque prefiero mil veces el dolor punzante, que el dolor adormilado del alcohol, ahora mis penas no se ahogan en alcohol, se ahogan entre letras.

Y que nadie piense que mis utensilios cambiaron de lugar, todas las cosas que Trompo y yo necesitamos están en el mismo sitio, nadie las movió, no tengo que cambiar nada, mi t4 espera en la puerta, igual que soy consciente de que di, mi cien por cien, para poder disfrutar de un festival en sobriedad, en un festival sin un lio, también se que, aunque me cueste la vida, mi vida la gobierno yo.

Y, para terminar, que como dije, que hoy estoy jodido, pero que no estoy vencido, que recuperaré como humilde guerrero que soy, cada palmo de terreno perdido, que nadie me tuvo que decir que la batalla era difícil, igual que, aunque todo haya acabo así, yo se que al final vencí, pero solo por hoy, cuidado, humildad, mañana un escalón mucho más pequeño puede derrotarme.

Pdta.: Quiero terminar diciendo que por favor, no olvidemos la finalidad de este blog,yo aquí no denuncio nada, yo aquí solo cuento mis experiencias a modo que, cualquier persona que se pueda ver identificada no recorra el mismo camino que yo, además, queridos lectores, que se que los tengo, fieles corazones totalmente correspondidos, os estoy contando una historia, una historia de la que a lo mejor no habéis sido conscientes, y se de vuestra inteligencia, pero todos sabemos que la historia, 

Entre un Patrol Y una Furgoneta, tiene fecha de caducidad, en algún momento, el pasado pescará al presente, ahora es la historia que viene después de la furgoneta, una historia que si., no tendrá fin.

 Gracias a todos, nunca vencido.